(para cuatro comensales):
200 g de Sobrasada de Mallorca
16 piezas de sardina de tamaño mediano
2 huevos
Harina floja
Pan rallado
Aceite de oliva para freír
Sal y pimienta
Quitar la cabeza y la espina central del pescado una vez eliminadas las escamas.
Limpiar cada una de las piezas de sardina con abundante agua. Secar con la ayuda de un paño o papel de cocina. Sazonar con un poco de sal y pimienta. Disponer en el centro pequeños trozos de sobrasada procurando que ocupen el lugar de la espina central.
Unir las dos supremas del pescado, dándoles la forma primitiva de la sardina. Pasar el pescado por harina, después por huevo batido y por último por pan rallado. Freír las sardinas con el aceite de oliva en una sartén.
Servir el pescado una vez frito acompañado de una ensalada de endibias.
Receta aportada por el Consell Regulador de la IGP Sobrassada de Mallorca